Nos encontramos ante un momento de inestabilidad política que no parece tener solución. En este contexto, los jóvenes somos unos de los principales afectados por los numerosos problemas en el sistema educativo a los que no se hace frente.
Según la información de "El País" <<el examen que sustituirá a la actual Prueba de Acceso a la Universidad (PAU, la conocida Selectividad) arrancará el curso que viene con menos cambios de los que se preveían con la reválida de bachillerato que introdujo la Ley Orgánica para la Mejora de la Calidad Educativa (LOMCE), la reforma educativa del PP. Se seguirá haciendo en las facultades, corregidas por funcionarios y con una nota final que servirá para todos los campus.>>
Es decir, de acuerdo con esta información, el cambio solo afectará al nombre, puesto que el sistema de corrección y examen parece continuar. Por lo tanto, lamentamos no poder aclarar el futuro de nuestra educación, y más cuando la repetición de elecciones parece más que evidente. Esperemos que se de un golpe sobre la mesa y podamos saber a qué nos enfrentaremos en los próximos años.

Dani Gámez y Clara Lebrón